La luz del mensaje
Mas el que practica la verdad viene a la luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios. Juan 3:21
¿Tenemos miedo de que los demás se enteren de lo que hacemos, o nuestra vida se enciende como una lámpara que se pone sobre un candelero y alumbra a todos los que están en casa, como dijo Jesús en el Sermón del monte?
Hay quienes no escuchan los mensajes en la iglesia o no leen la biblia ni testifican a otros porque, inconscientemente, se están ocultando no sólo de los demás sino también de Dios. Una voz -que ellos no oyen- les advierte que, si se exponen a la luz de la palabra de Dios, su conciencia les molestará.
Al contrario, los que practican una vida de verdad, de autenticidad en su fe, se gozan en compartirla con otros y en exponerla a la luz de lo que Dios tiene para decirles a través de la Biblia o de otros medios. Entonces reciben más luz y con ella más regocijo.
Señor, quiero practicar siempre lo que es tu voluntad para sentirme feliz cuando estoy ante la luz de tu mensaje.